SIGNO DE ENFERMEDAD

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Como siempre me dispongo a levantarme en las horas de la mañana, para realizar mi rutina y dirigirme a clases, pero hay algo que no se encuentra en regla, los sentidos están más agudos, las palpitaciones más lentas y la temperatura del cuerpo no es la ideal , todo encuadra para que estos síntomas lleguen y aparezca el temido virus, si ese virus tan temido por muchos , tan odiado por otros y tan rechazado por todos

Calor corporal, dolores generales, y muchos síntomas más son la causa de no querer levantarme del cuarto, pero el deber así lo exige, con el trascurso del día el cuerpo sufre más y más a causa de su alto estado de debilidad y fragilidad.

Un pequeño medicamento es la calma momentánea para dolores y malestares, pero no la cura definitiva.

Como el deber lo exige el día sigue y con dificultad logro llevar a cabo mis actividades normalmente aunque con poco activismo y sin el mismo ímpetu. Ya que solo deseo descansar y recuperar energías para el día venidero

Cuando el día está finalizando y el cuerpo da un dictamen de deterioro absoluto y el virus ya yace en gran parte del cuerpo es mejor disponerse a descansar, para de esta manera reponer la mayor cantidad de energía posible y seguramente dar más vitalidad al día siguiente, el cual igual que el anterior estará lleno de duro trabajo y expectativas nuevas , pero el virus intentara asechar de nuevo para evitar el normal desarrollo del día , solo queda ser prudente y anhelar al máximo que este desaparezca lo más pronto posible.